Activos Vs. Pasivos y cómo tu sueño te dice si estás acumulando capital.
La clave es ganar dinero mientras duermes
Cuando llegamos a Estados Unidos, todo lo tenemos que resolver a la vez: un trabajo, una renta, el seguro, los papeles, y así. Y cada cosa es más urgente que la otra.
Sin embargo, cuando empezamos a estabilizarnos, nos va mejor y disponemos de un ingreso estable, hay una pregunta clave que debemos hacernos:
¿Qué hago con lo que me queda luego que le pago a todos los demás: la renta al landlord, los taxes al gobierno, la electricidad a la compañía eléctrica, etc.? ¿Estoy acumulando cosas que me harán avanzar… o que me frenarán?
O, dicho en términos financieros muy simples: ¿estoy llenando mi vida de activos o de pasivos?
Activos: los que trabajan por y para ti, hasta cuando duermes
Un activo es todo aquello que pone dinero en tu bolsillo, incluso mientras tú estás haciendo otra cosa.
Puede ser una propiedad que alquilas y que te deja un dinero extra cada mes, una inversión en la bolsa que te genera dividendos, derechos de autor, cobros de comisiones, cuentas de ahorro de alto rendimiento o un negocio que sigue operando sin que tú estés 24/7.
Creo que te llevas la idea.
Pasivos: todo lo contrario, te quitan dinero y te quitan el sueño
Un pasivo, en cambio, es todo lo que constantemente te cuesta dinero. Generalmente se ven lindos: el carro nuevo y su pago mensual, los viajes exóticos que pagaste con un crédito que no sabes aún como vas a saldar, o la casa grande con piscina que no puedes pagar pero que "te da status".
O suscripciones que ni recuerdas, o el último iPhone cuando el tuyo funciona perfecto. Aquí la lista parece ser infinita.
Los pasivos son los que te quitan dinero cada mes, y casi siempre también te quitan el sueño.
Y no es que esté en contra de que disfrutemos de la vida. Para nada. Sólo que debemos disfrutar hasta donde nos lo podemos permitir. E incluso menos de lo que podemos, pues de la diferencia entre lo que ingresas y lo que gastas es que sale la riqueza que empiezas a acumular.
Una anécdota personal
Cuando aún vivía en Cuba, compré un apartamento en los altos de mi casa para ponerlo en Airbnb. Mi intención era que me diera un ingreso extra todos los meses. Quería convertirlo en un activo.
Y recuerdo que una vez, ya el negocio andando, tuve de huéspedes a cuatro dominicanos grandes, fuertes, simpatiquísimos y muy bullangueros. Su especialidad parecía ser hacer ruido.
Y más de una vez me despertaron en la noche, pues estaban en el piso superior.
Pero yo siempre me decía: “tranquila, que el cochinito (la alcancía) está sonando esta noche”. Ganaba dinero mientras dormía y esa sensación me daba mucha paz mental.
¿Y por qué parece ser tan natural llenarnos de pasivos?
Porque no sabemos, y por supuesto, nadie nos explica. Porque el sistema se alimenta y prospera gracias a lo que consumimos.
El sacrosanto marketing que nos rodea y envuelve nos lleva como corderitos a comprar cosas que, seamos honestos, no necesitamos. Solo las queremos tener.
Juguetes que nos dan placer instantáneo… y que luego nos drenan las finanzas.
¿Cómo empezar a construir activos?
La verdadera riqueza se construye de a poco y sin mucho ruido. Y no necesitas tener miles de dólares para comenzar. Lo que necesitas es cambiar el enfoque.
En lugar de pensar solo en lo que puedes comprar, empieza a pensar en lo que puedes construir. Empieza por el principio, no por el final.
Construir activos es la estrategia que te va a llevar a ser dueño/a de tu tiempo. Y de tu sueño.
Y lo bueno es que esto se vuelve exponencial: mientras más activos tienes, más activos puedes tener.
Piénsatelo, saca tus cuentas y deja que los números hablen.
Y si no te convenzo con eso, pregúntate con cada compra: ¿Quién se hace más rico: el CEO de Apple o yo? ¿Jeff Bezos o yo?
Entonces, te recomiendo: presupuesta tus gastos, ahorra, invierte, dale seguimiento y repite.
Y ya sabes: si no estás ganando dinero mientras duermes —o al menos no lo tienes en planes—, créme que estás trabajando más de lo que debieras.
En vez de acumular preocupaciones, acumula lo que te genere ingresos.
Así es como, de verdad, estarás trabajando para ti.
Un tip tecnológico 💡 (que también es emocional)
Activa alertas en la app de tu banco y en la app donde tengas tus inversiones para que sepas cada vez que te entre un ingreso pasivo. Y cada vez que recibas las notificaciones, apláudete y celebra por lo que vas logrando. Recuerda que se trata de ir “sin prisa pero sin pausa”.
See you next week!
Ileana